Todo lo que ocurre tras la muerte de la Reina, desde la colocación del anuncio en la barandilla del Palacio de Buckingham hasta su entierro en la Capilla de San Jorge, se ha planificado durante décadas.
Los arreglos -denominados Puente de Londres- incorporan la Operación Unicornio, los planes de contingencia por la muerte de la Reina en Escocia.
Cada detalle, ya sea el recorrido de su ataúd o los himnos que se cantarán en su funeral, ha sido minuciosamente analizado. Al mismo tiempo, sin embargo, hay un elemento de imprevisibilidad. ¿Qué forma tomará el dolor del público? ¿Cuál será la afluencia de público? ¿Y cómo reaccionará la familia real? Todos los horarios están sujetos a cambios.
El velatorio de la Reina continúa mientras se espera un ensayo para el cortejo fúnebre de Estado. Decenas de miles de personas más se unirán a la cola y pasarán por Westminster Hall a un ritmo de unas 3.000 por hora.
Fuentes del Gobierno creen que en los próximos días los dolientes se enfrentarán a colas de hasta diez millas con hasta 750.000 personas que se espera que intenten ver el féretro de la Reina.
El estado de reposo continúa, terminando el domingo.
El día del funeral, Westminster Hall cerrará al público por la mañana. Alrededor de las 10.30 horas, un grupo de portadores trasladará el féretro desde el catafalco hasta el carruaje de Estado, que estará frente a la puerta norte de Westminster Hall. La familia real seguirá el féretro hasta la gran puerta oeste de la Abadía de Westminster.
El servicio, que probablemente será dirigido por el Decano de Westminster, comenzará a las 11 de la mañana. Al final, cuatro trompetistas estatales harán sonar el último poste y la diana, seguidos del himno nacional. Un grupo de portadores llevará el féretro hasta el carro de armas de Estado situado frente a la puerta oeste, desde donde será llevado a Wellington Arch, en Hyde Park Corner. Al llegar a Wellington Arch, el féretro será trasladado al coche fúnebre de Estado. Habrá un saludo real y el himno nacional.
Al llegar a Windsor, el féretro entrará en la Capilla de San Jorge, donde será llevado al catafalco.
Está previsto que el servicio de entierro comience a las 16:00 horas. Antes del himno final, el joyero de la corona imperial, el orbe y el cetro serán retirados del ataúd. Al final de la ceremonia, el féretro es introducido en la bóveda real. El Arzobispo de Canterbury imparte la bendición y se canta el «God Save The King».
Por la tarde, los miembros de la familia real se despedirán por última vez. Llegarán al decanato, donde el decano los llevará a la King George VI Memorial Chapel, que se encuentra dentro de la St George’s Chapel.
Durante el servicio de entierro privado es probable que Carlos esparza tierra sobre el ataúd, como hizo la Reina en el funeral de su padre. Será enterrada en la capilla junto a su padre, su madre y las cenizas de su hermana.